Descubren en Japón nueva especie de orquídeas con pétalos como de cristal

La nueva especie de orquídeas posee pétalos que parecen ser de cristal. Con frecuencia las nuevas especies de flores están escondidas donde los expertos menos esperan, puede ser en jardines, en parques y hasta en macetas de balcones.

Una nueva especie de orquídeas que siempre estuvo frente a nuestras narices

Y fue en uno de estos lugares donde justamente un equipo de científicos japoneses lograron identificar una nueva especie de orquídea, sus pétalos son de color rosa y blanco, son tan frágiles y delicados que parece que fueran de cristal.

La nueva especie es vecina de ejemplares de otra especie de orquídea que es bastante común en Japón, y a la que se le parece mucho. Este hallazgo representa un importante recordatorio de que, con frecuencia, especies desconocidas viven delante de nuestras narices, así lo informaron los expertos japoneses el pasado viernes en la revista “Journal of Plant Research”.

El horticultor y jefe de la Colección de Orquídeas de los Jardines Smithsonian, Justin Kondrat, declarón para CNN por medio de un correo electrónico que, la increíble diversidad de la familia de las orquídeas (Orchidaceae) es sumamente asombrosa, y nuevos hallazgos como el de esta nueva especie de Spiranthes refuerzan la urgente necesidad de estudiar y proteger estas joyas botánicas. El horticultor no participó en el estudio.

Las orquídeas pertenecientes a este género (Spiranthes) son llamadas “trenzas de mujer” por su gran parecido con mechones de pelo ondulado de las mujeres. Estos ejemplares presentan un tallo central alrededor del cual crece una espiral ascendente de pequeñas flores en forma de campana que pueden ser rosas, moradas, amarillas o blancas.

Una nueva especie que puede tener cientos de años

Existen alrededor de cincuenta especies de Spiranthes en América, Euroasia y Australia, por lo general se hallan en regiones templadas o tropicales, y estas flores se conocen en Japón desde hace cientos de años, según la investigación.

Antes del descubrimiento de la nueva especie de orquídea, había en Japón 3 especies de Spiranthes, a saber: S. sinensis, S. australis y S. honkongensis. Y se pensaba que solo la S. australis crecía en Japón continental.

Las poblaciones de la recién descubierta orquídea se encontraron en la prefectura de Tokio, muy próximo a la isla de Hachijo, lo que inspiró el nombre de la nueva especie de orquídea: Spiranthes hachijoensis.

No obstante, durante una investigación llevada a cabo en Japón continental hace más de 10 años, el autor principal del estudio, Kenji Suetsugu, quien es catedrático de la División de Biodiversidad, Ecología y Especiación de la Universidad de Kobe, halló algo muy extraño: flores que se presumía eran de S. australis pero con tallos lisos (S. australis suele tener tallos con vellos).

Suetsugu dijo a CNN en un correo electrónico que, las poblaciones de orquídeas con tallos lisos también florecieron cerca de un mes antes de lo que lo hacía normalmente la S. australis, otra señal de que estas flores rebeldes podrían no ser S. australis. Lo que los llevó a investigar más, agregó Suetsugu

Antes del descubrimiento de la nueva especie de orquídea, había en Japón 3 especies de Spiranthes

Buscando la flor sin vellos

Desde 2021 hasta el año pasado, Suetsugu y sus colegas buscaron las orquídeas sin vello y analizaron las características físicas, los medios de reproducción de las plantas y su genética. En vista de que las especies de Spiranthes con frecuencia se solapan geográficamente y pueden parecerse mucho, es de suma importancia tener un conocimiento exhaustivo de la ecología y de la distribución de las especies relacionadas para poder distinguir mejor las características únicas de una nueva especie, señaló Suetsugu.

Por otro lado, los colores de las orquídeas S. hachijoensis variaban del rosa púrpura al blanco; presentando pétalos de entre tres y cuatro milímetros de longitud, de acuerdo con los investigadores.

La S. hachijoensis tenía flores más diminutas con base más anchas y pétalos centrales más cortos que otras especies del género Spiranthes. Además, la S. hachijoensis carecía de una estructura para la autopolinización.

Desde el punto de vista morfológico, era bastante parecida a S. hongkongensis y S. nivea, aunque las pequeñísimas diferencias físicas y el análisis genético permitieron confirmar que era una flor única. Además de la prefectura de Tokio, los autores de la investigación hallaron S. hachijoensis en otras partes del distrito de Kanto y en los distritos de Shikoku, Chubu y Kyushu.

Presente en la antología poética más antigua de Japón

Suetsugu también aseguró que, están encantados de haber identificado una nueva especie de Spiranthes. Y agregó que la Spiranthes es la orquídea más popular en Japón y ha sido muy apreciada por siglos. Esta flor se menciona en la antología poética más antigua del país oriental, que data del año 759, dijo Suetsugu.

Debido a que la flora japonesa está ampliamente documentada y estudiada, la identificación de una nueva especie de planta en Japón es un hecho poco común. Este hallazgo posiblemente despertará el interés por esta orquídea que es mucho más rara que la S. australis, afirmó Suetsugu.

El experto dijo en su correo electrónico que, este hallazgo de nuevas especies ocultas en lugares comunes resalta la necesidad de la exploración persistente. Y hasta en entornos aparentemente poco llamativos, agregó. Y que esto también pone de manifiesto la necesidad de seguir investigando taxonómica y genética para poder evaluar con precisión la diversidad de especies.

La belleza tan frágil de las “trenzas de mujer” recién descubiertas es una característica que distingue a las orquídeas. Sin embargo, también lo es su vulnerabilidad. Se conocer cerca de 28.000 especies de orquídeas a nivel mundial. Pero la pérdida de hábitat ha puesto en riesgo a muchas especies, y la popularidad de estas flores no las salvará si no son protegidas.

Por su parte, Kondrat afirmó que, las orquídeas se encuentran estrechamente relacionadas con muchos ecosistemas, al igual que con diferentes aspectos de la ciencia y la cultura. Las personas no pueden evitar sentirse cautivadas por sus múltiples colores y formas. Es esta respuesta emocional la que se espera que anime e inspire a la gente a tomar medidas que permitan protegerlas y salvaguardarlas, concluyó el experto.

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