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Los neandertales han ayudado al reflejo de la humanidad misma, desde haber sido descubiertos en el año 1856. Lo que creíamos conocer de ellos se ha ido adaptando para aplicarlo en nuestras propias tendencias culturales, percepciones científicas y nuestras normas morales y sociales. Fueron considerados como especímenes enfermos. Luego, los primitivos parientes subhumanos. Hoy en día no se duda que anteriormente fueron humanos avanzados.
El espécimen Homo neanderthalensis fue bastante similar a nosotros, convivimos con estos, nos cruzamos a menudo. Hace muchos siglos se extinguieron los neandertales, mientras tanto nosotros pudimos sobrevivir, avanzamos y terminamos tomando el poder del planeta.
Los neandertales tenían un cerebro más grande que el homosapien sapien
Los neandertales tuvieron su evolución hace más de 400 mil años, posiblemente de que inició el Homo heidelbergensis. Tuvieron un gran éxito y se extendieron partiendo desde el Mediterráneo hasta la tierra de Siberia. Fueron bastante inteligentes, con unos cerebros más grandes que los Homo sapiens.
Fueron desarrollando parámetros de mayor caza, hacían recolecta de hongos, mariscos y plantas, calculaban y tenían el control del fuego para preparar sus comidas. Realizaban implementos confeccionados, vestían de pieles de seres vivos, realizaban cuentas de conchas y tuvieron la capacidad de tallar figuras en las paredes de cuevas.
Protegían a sus enfermos, ancianos y jóvenes, preparaban refugios para cuidarse de amenazas, resistían veranos fuertes e inviernos duros, hasta enterraban muertos.
Las muestras de restos óseos de los neandertales indican que poseían un cerebro casi tan grande como el de los seres humanos; por lo que se podría estimas que eran razonables, inteligentes y capaces de resolver conflictos.
Esta especie se topó con los antepasados de nosotros en múltiples ocasiones en el transcurso de centenarios de miles de años. Ambos especímenes compartieron el continente europeo a lo largo de 14 mil años como mínimo. Inclusive mantenían relaciones sexuales.
La extinción de un espécimen
El distintivo más notorio entre los neandertales y el homo sapiens sapiens es que esa especie se extinguió hace 40 mil años atrás. La razón específica de su extinción todavía no se sabe con certeza, aunque muy posiblemente fue el resultado de una mezcla e interacción de dos factores.
Por una parte, el clima de la era glacial final fue muy variable, cambiando de estar en el frío a entrar en calor extremo y al revés; lo que propicio una presión ante las fuentes de alimentación de seres vivos y plantas, lo que indicó que los neandertales debieran adaptarse a las alteraciones ambientales casi siempre.
Por otro lado, anteriormente nunca hubo bastantes neandertales, puesto que la población completa jamás sobrepasó los miles de individuos.
Convivían en pequeños núcleos, de cinco a 15 personas, a diferencia del homo sapiens que juntaba un grupo de más de 145 personas. Estas pequeñas comunidades neandertales alejadas pudieron ser insostenibles genéticamente de forma progresiva.
Lo cierto es de que los neandertales se desarrollaban en grupos pequeños fue, en perspectiva de diferentes autores, uno de los motivos por lo que acabó en la extinción del espécimen.
Y por último lugar, tenían que competir con los demás depredadores, en específico los equipos humanos modernos que tuvieron lugar en África hace más de 50 mil años. Se estima que varios neandertales pudieron ser asimilados por pandillas mayores de homo sapiens.
Qué hay de las muestras
Los neandertales dejaron múltiples huellas como rastro para que las analicemos muchísimos años, luego de que ya dejaran de existir; varias de las que se pueden ver en la exposición especial que presenta la organización del Museo de Historia Natural de Dinamarca.
En el transcurso de los últimos 150 años hemos extraído muestras de fósiles, herramientas de madera, de piedra y hallado joyas y baratijas que olvidaron atrás. Hemos encontrado enterramientos y en la actualidad cartografiado su genoma partiendo del ADN antiguo. Al parecer el 99,7 % de este en los neandertales y el de los seres humanos modernos es casi igual y no queda duda de que fueron nuestros parientes extintos más parecidos.
Tal vez lo más impresionante es que la evidencia de mestizaje que ha plasmado rastros de ADN neandertal en los seres humanos de hoy en día. Bastantes asiáticos y europeos cuentan con el 1 % y el 4 % de ADN neandertal. Los únicos humanos modernos sin huellas genéticas de los neandertales son las comunidades africanas localizadas hacia el sur del Sahara.
De forma irónica, con un gentilicio mundial hoy en día de 8 millones de individuos, lo que quiere decir que jamás ha habido otro ADN neandertal en el planeta Tierra.
Más inteligentes de lo que se pensaba
Las pinturas rupestres encontradas en diferentes continentes confirman que los neandertales fueron mucho más inteligentes que lo que inicialmente se creía.
El examen del genoma neandertal nos apoya en el conocimiento de su apariencia, puesto que existen pruebas de que ciertos neandertales evolucionaron con tendencia a la piel pálida y el cabello rojo tiempo antes del homo sapiens. Los múltiples genes que comparten entre este espécimen y los humanos modernos es que están conectados con cualquier cosa, desde poder hablar hasta distinguir los sabores de los alimentos.
Además, hemos aumentado nuestra información en cuanto a la salud del ser humano. Por ejemplo, sectores del ADN neandertal que pudo haber sido anteriormente un beneficio a favor de los humanos hace muchísimos años aparenta ahora generar conflictos al momento de la combinación con una clase de vida occidental moderna.
Existen relaciones con el alcoholismo, las alergias, la coagulación de sangre, la obesidad y la depresión. Hace poco, los expertos señalaron una vieja variante genética de este espécimen, pudiendo incrementar el peligro de complicaciones letales como contrayendo el coronavirus.
Extinción de los neandertales de manera gradual
Exactamente como los dinosaurios, el espécimen neandertal no tenía idea de lo que le iba a suceder. Lo diferente es que los dinosaurios no existieron más de manera totalmente repentina luego del impacto de un meteorito enorme que venía del espacio exterior. En cambio, la extinción de los neandertales fue de manera gradual.
Terminaron desapareciendo su mundo, un entorno confortable que habían creado con éxito en centenares de años y que lentamente se convirtió en su contra, hasta que la existencia total fue inaceptable.
Las alteraciones que perjudicaron el medio ambiente en la prehistoria habrían jugado un rol fundamental en la extinción de los neandertales, según los autores.
Dicho espécimen cuenta con un propósito distinto. Observamos nuestro reflejo en ellos. No tenían idea de lo que les pasaba y no tuvieron más alternativa que continuar en la ruta que los guió a la extinción terminantemente. A diferencia de nosotros, que somos muy conscientes del dolor de nuestra situación y de la potencia que tenemos en la Tierra.
Las actividades humanas están alterando el clima y nos conduce directamente a la extinción masiva número seis. Podemos reflexionar sobre nuestra situación, situación que hemos provocado nosotros mismos con nuestro accionar.
Si no deseamos terminar como dicho espécimen, es mejor que hagamos algo al respecto, y pronto trabajando de forma colectiva y enfocada para una vida más sostenible. Las extinciones anteriores nos recuerdan que podemos acabar igual, extintos.