¿Cómo reacciona nuestro cuerpo si dejamos de tomar alcohol durante un mes?

Cada vez hay más gente que intenta reducir su consumo de alcohol, por esta razón le preguntamos a la ciencia qué le pasaría a nuestro cuerpo si dejamos de ingerir alcohol durante un mes y cuáles serían realmente los beneficios que deberíamos esperar.

¿Qué beneficios podemos esperar realmente en nuestro cuerpo si dejamos de consumir alcohol por un mes?

Ya es costumbre en varias regiones del mundo que una vez al año millones de personas renuncien al consumo de alcohol durante todo un mes. Se trata de una tradición que empezó con el llamado “Enero Seco” y que se ha extendido a iniciativas parecidas, como “Octubre Sobrio”. Ya sea como parte de una campaña coordinada o solo como un esfuerzo individual de consumir menos alcohol, el número de personas sobrias a nuestro alrededor parece estar creciendo.

Este año, uno de cada siete adultos del Reino Unido se planteó participar en el “Enero Seco”, al tiempo que el 35 % de los  adultos de los Estados Unidos, admitió haber intentado dejar de tomar alcohol durante un mes entero el año pasado. Mientras que en España, no existen datos específicos acerca de esta nueva costumbre que parece que está ganando más seguidores cada año. Sin embargo, las estadísticas oficiales revelan que el consumo de alcohol se ha mantenido más o menos igual durante los últimos años.

Si cada vez más personas desean participar en este tipo de iniciativas, cabe hacerse el planteamiento sobre la cuestión de cuáles son los beneficios de dejar de consumir alcohol durante un mes para nuestro cuerpo, y si un mes es suficiente tiempo para comenzar a experimentar resultados significativos.

En este sentido, Shehzad Merwat, gastroenterólogo de UTHealth Houston (EEUU), explicó que los efectos van a ser diferentes para cada individuo, todo dependerá del tiempo que cada quien lleve consumiendo alcohol. Como ya comienzan a demostrar los estudios, reducir el consumo de alcohol durante todo el año tiene varias ventajas, y medidas como el “Enero Seco” pueden desempeñar un rol significativo en la moderación de los hábitos de consumo para nuestro cuerpo, agregó el experto.

¿De qué forma afecta el alcohol a nuestro cuerpo?

El alcohol puede dañar a nuestro cuerpo de muchas formas. Los efectos más significativos se producen en el hígado, que es el órgano donde se descompone el alcohol, aunque aparecen efectos secundarios en otros órganos de nuestro cuerpo, como el tracto gastrointestinal, el corazón, el cerebro y el páncreas. Estos efectos pueden ser muy diversos y con frecuencia dependen del tiempo que el alcohol permanece en el organismo y de la cantidad que se haya consumido.

Paul Thomes, quien es investigador de la Universidad de Auburn, en Alabama (EEUU), cuyo trabajo se centra en el mecanismo del daño orgánico inducido por el alcohol; señaló que los niveles de alcohol en la sangre son un factor relevante que daña los órganos.

Thomes explicó que el hígado se encarga de descomponer el alcohol en una manera menos tóxica para que pueda ser eliminado en nuestro cuerpo. Durante este proceso, la sustancia se descompone primero en acetaldehído, que es bastante tóxico y un conocido carcinógeno. Generalmente el acetaldehído se descompone muy rápido; no obstante, si este proceso se retrasa o es interrumpido, ya sea a causa de niveles elevados de alcohol en sangre o a otro factor subyacente, como fármacos que interfieren en el metabolismo hepático, puede acumularse en todo el cuerpo y provocar daños.

Consecuencias del consumo crónico de alcohol

El experto agregó que el tiempo durante el que las moléculas tóxicas se acumulan en las células y los tejidos de nuestro cuerpo será lo que determine el grado de daño.

Dicho daño puede impactar a todos los órganos del cuerpo, lo que se traduce en una serie de peligros para la salud a largo plazo como consecuencia del consumo crónico de alcohol, como hipertensión arterial, un mayor riesgo de desarrollar ciertas clases de cáncer, enfermedades hepáticas y cardiopatías. El consumo crónico de esta sustancia también puede debilitar el sistema inmunitario, además de afectar el buen funcionamiento del cerebro.

¿Qué debo hacer para que mi cuerpo se recupere del alcohol?

La mayoría de los estudios acerca de los efectos de dejar de consumir alcohol se enfocan en los grandes bebedores. No obstante, incluso en los tomadores más ligeros, se pueden notar efectos sobre la salud cuando que se deja de ingerir alcohol durante un mes completo, aseguró Carrie Mintz, psiquiatra de la Universidad de Washington (EEUU). Y agregó que esos cambios al mes ya se pueden ver.               

Luego de dejar el alcohol, los cambios comenzarán a aparecer en cuestión de semanas. Esto incluye el hígado, que puede comenzar a revertir el daño provocado en la mayoría de las 4 etapas de la enfermedad del hígado relacionada con esta sustancia, la cual comienza con la acumulación de grasa, después avanza a la inflamación crónica, que conlleva a la cicatrización, y en última instancia resulta en cirrosis. Este órgano puede curarse en todas las fases a excepción de la última.

Thomas aseguró que el hígado tiene una gran capacidad regenerativa. Las 3 primeras etapas del daño hepático son reversibles durante la abstinencia del alcohol, afirmó. La abstinencia de alcohol puede hasta ser buena para los enfermos de cirrosis hepática, debido a que detiene el avance de la enfermedad y alarga la supervivencia del paciente, a pesar de que no revierte la enfermedad.

Otros beneficios para la salud

Por otro lado, dejar el alcohol puede traer otros beneficios para nuestro cuerpo y nuestra salud, que además se piensa que se deben a la disminución de los niveles de alcohol y acetaldehído en el organismo.

En una investigación en la que se llevó a cabo un seguimiento a 94 grandes tomadores moderados que dejaron el alcohol por un mes, los participantes experimentaron mejoras en la resistencia a la insulina, control de peso y de la presión arterial, en comparación con los participantes que no se abstuvieron.

También es beneficioso para conciliar más fácil el sueño y mejora nuestros estado de ánimo, incluida la disminución de la depresión y la ansiedad. También se traduce en una piel y un intestino más sanos. Ha quedado demostrado que esta sustancia altera la composición microbiana del intestino, un trastorno conocido como “disbiosis”, y causa daños en las células que lo recubren, lo que puede provocar que el contenido del intestino se derrame en el torrente sanguíneo.

A lo que Thomes dijo que en el intestino, esta disbiosis puede revertirse, aunque no totalmente, hasta después de 3 a 5 semanas. Se requiere más tiempo para la restauración del microbioma intestinal y el daño provocado al intestino, agregó.

No consumir alcohol durante un mes además suele presentar la ventaja de ayudarnos a entender cómo nuestros hábitos de consumo de bebida alcohólicas están afectando a nuestra salud y bienestar general.

Dejar de consumir alcohol durante un mes puede llegar a ser algo muy revelador

Steven Tate, médico de la Universidad de Stanford (EEUU) especializado en medicina de las adicciones, afirmó que dejar de consumir alcohol durante un mes puede ser muy revelador. Y que el alcohol puede causar o empeorar problemas de salud como la falta de sueño, la ansiedad o la depresión.

El consumo habitual de bebidas alcohólicas además puede ser un intento de automedicarse para los trastornos subyacentes del sueño o del estado de ánimo. Abandonar su consumo durante un mes da las personas la oportunidad de desentrañar si el alcohol está provocando (o enmascarando) problemas de salud, agregó Tate.

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