Cambio climático, en Londres se reconstruyen muros de contención contra inundaciones y está provocando enfermedades en 2.400 millones de trabajadores

Debido al cambio climático se espera que el nivel del mar aumente casi un metro de aquí al año 2100 y que las tormentas sean cada vez más intensas. Por otro lado, el cambio climático también está poniendo en riesgo la salud de más de 2.400 millones de trabajadores en todo el mundo. Enfermedades que van desde el cáncer a la intoxicación por pesticidas se vienen relacionando con los cambios ambientales.

El cambio climático amenaza con provocar grandes inundaciones en Londres

En Reino Unido las autoridades anunciaron que los muros de contención contra las inundaciones que rodean Londres se tendrán que subir medio metro más en los próximos años para poder garantizar la protección contra las consecuencias del cambio climático. La noticia se dio a conocer con motivo del cuarenta aniversario de la construcción de los muros de contención del río Támesis, los cuales protegen la capital británica de las inundaciones.

Aunque al principio estos muros iban a proteger la ciudad hasta el año 2030, ahora se informó que seguirán funcionando hasta 2070, de acuerdo con lo anunciado por la Agencia de Medio Ambiente del Reino Unido. Sin embargo, se espera que el nivel del mar llegue a aumentar cerca de un metro más de aquí al año 2100 y que las tormentas sean cada vez más intensas a causa del cambio climático.

Lo que sugiere que, de acuerdo con las autoridades, serán requeridas mayores defensas contra las inundaciones.  

Planes para subir los muros de contención en Londres

Existen planes para elevar con medio metro más los muros de contención y las defensas contra las inundaciones a lo largo del río Támesis desde ahora hasta el año 2040 y ampliar los muros a través del centro en la capital británica de aquí al año 2050.

El problema es cómo hacerlo correctamente. Las alternativas incluyen mejorar lo que ya está construido para enfrentar la subida del nivel del mar y las tormentas que cada vez son más potentes en el año 2070 o la opción de la construcción de embalses río abajo para el almacenamiento del agua de las inundaciones.

También podría representar una alternativa, la construcción de una nueva barrera de diseño similar a la que existe actualmente, que permita el paso de embarcaciones.

Andy Batchelor, director de operaciones del Támesis, quien celebró su último día de trabajo en el cuarenta aniversario, declaró que la fiabilidad y eficacia de los muros de contención demuestran la sofisticacion de su diseño, una obra que fue hecha por un grupo de ingenieros de gran talento, sumado al mantenimiento y funcionamiento continuados que llevó a cabo el equipo de la barrera.

Batchelor comenzó a trabajar en la obra el día de su inauguración y lleva 25 años desempeñando el cargo de director de operaciones. El funcionario dijo que no obstante, no se dormirán en los laureles ante la amenaza de la subida del nivel del mar, por lo tanto se han comprometido en trabajar con sus socios para revisar y escoger una opción para este mismo año en el Plan 2100 del estuario del río Támesis, con el propósito de garantizar la protección de la ciudad a largo plazo.

La barrera del río Támesis de Londres

Esta barrera fue inaugurada el 8 de mayo del año 1984 por la propia Reina Isabel II y tenía como objetivo proteger la capital británica de las inundaciones hasta 2030. Demoró 8 años en ser construida y tuvo un costo de 535 millones de libras, el equivalente a unos dos mil millones de libras en la sociedad actual.

La barrera se encuentra ubicada aguas abajo de Greenwich y próxima al aeropuerto de Londres City, el muro del Támesis, que es la segunda barrera contra inundaciones más grande del planeta, está formada por diez compuertas de acero que son tan anchas como la abertura del Puente de la Torre.

Esta construcción sirve para prevenir graves inundaciones en un área de 125 km2. Y si la barrera no estaría allí,  los muros de contención tendrían que ser 3 metros más altos. Desde el momento de su construcción, la barrera del Támesis se ha cerrado 221 veces en total. Sin esta estructura las tormentas y la subida del nivel del mar habrían inundado todas las construcción de la orilla del río.

El cambio climático está poniendo en riesgo la salud de 2.400 millones de trabajadores en todo el mundo

Más de 2.400 millones de trabajadores en el planeta están expuestos a riesgos para la salud relacionados con el cambio climático. Un nuevo documento del organismo de las Naciones Unidas que se encarga de los asuntos relacionados con el trabajo y las relaciones laborales, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ha revelado que el cambio climático ya está teniendo graves repercusiones en la seguridad y en la salud de una cantidad asombrosa de trabajadores en todo el mundo.

Por lo que se estima que más del setenta por ciento de los 3.400 millones de trabajadores del mundo pueden verse expuestos a un calor excesivo en algún momento de su jornada laboral. Los números del año 2020, el último de que se disponen datos, están por encima de los de hace 2 décadas, cuando eran del 65,6 %.

No es solo el calor lo que amenaza a los trabajadores

En el documento se muestra que las repercusiones climáticas van más allá del estrés térmico. Los trabajadores del campo y los obreros que realizan trabajos pesados en ambientes cálidos se encuentran expuestos a un cóctel de riesgos que puede desencadenar una serie de condiciones de salud peligrosas. También los trabajadores que laboran en espacios mal ventilados y en interiores calurosos corren riesgos.

Una gran cantidad de afecciones de salud han sido detectadas en trabajadores que se han asociado con el cambio climático, reza el informe. En la actualidad, existen 1.600 millones de personas que están expuestas a la radiación UV, además en el documento se confirman más de 18.960 muertes por cáncer de piel no melanoma al año, relacionadas con el trabajo.

Por otro lado, la contaminación atmosférica en los lugares de trabajo también está afectando a ese 1.600 millones de trabajadores. Además ha provocado 860.000 muertes al año entre las personas que laboran al aire libre. Los pesticidas también están vinculados con la salud de 870 millones trabajadores agrícolas. Lo que se traduce en 300.000 muertes anuales por envenenamiento con pesticidas.

Manal Azzi, jefa del equipo de Seguridad y Salud en el Trabajo de la OIT, aseguró que está bastante claro que el cambio climático ya está creando importantes peligros adicionales para la salud de los trabajadores.

Y agregó que es fundamental que se le preste atención a estas advertencias. Las consideraciones acerca de la seguridad y la salud en el trabajo deben formar parte de las respuestas al cambio climático, tanto en las acciones como en las políticas.

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